Tortitas de papa rallada | Cómo hacer la Receta Fácil

Preparar tortitas de papa rallada es sumamente fácil y esto significa que no nos tomaría más de 15 o 20 minutos prepararlas. Estas tortitas son un desayuno ideal cuando no contamos con demasiado tiempo en la mañana antes de salir de nuestro hogar, vale la pena darles una oportunidad.

Ingredientes tortitas de papa rallada

2 papas grandes peladas y ralladas.
1 cucharada de cebolla rallada.
3 huevos.
2 cdas. de harina.
Sal y pimienta al gusto.
Aceite vegetal para freír.

Cómo hacer tortitas de papa rallada

Tras haber rallado las papas y la cebolla, preparar esto puede tomarnos muy poco tiempo. La preparación no tiene mayor complicación y en menos de treinta minutos estaremos disfrutando de un excelente desayuno.

Tomaremos nuestra papa rallada, la colocaremos en un paño de tela y lo exprimiremos para sacar la mayor cantidad posible de líquidos.
En un recipiente verteremos la papa rallada, la cebolla también rallada, los huevos, la harina y condimentaremos con sal y pimienta.
Tendremos una mezcla lo suficientemente consistente como para darle forma. Tomaremos porciones de la masa del tamaño de la palma de nuestra mano y las aplanaremos.
En un sartén con aceite vegetal a fuego medio colocaremos nuestras tortitas de papa para que se doren y se termine de compactar. Si tenemos un sartén antiadherente no necesitaremos más que un par de cucharadas de aceite, pero también podemos usar abundante aceite para realmente se frían.
Pasados un par de minutos por cada lado de la tortita, la retiraremos del fuego, la colocaremos sobre un pedazo de papel absorbente y así deshacernos del excedente de grasa.
Pasados unos pocos minutos ya estarán listas nuestras tortitas.

Lo excelente de esta receta es que cuenta con una buena porción de carbohidratos y azúcares por la papa y contiene una porción de proteína gracias al huevo. Si deseamos podemos incorporar algún queso rallado a la mezcla para darle otro sabor, sazonar con un chile o simplemente acompañar las tortitas de queso, huevo, jamón, mantequilla o lo que se nos ocurra.